Cada vez hay más locos al volante, más desastrosos seres o individuos de característica animal que hacen uso de medios de transporte para hacer valer sus hormonas automovilísticas salvajes... lo que cariñosamente podríamos calificar como chóferes animalitos. Y como es complicado pensar razones, buscar porques o luchar contra ellos... sepa que hacer para convertirse en uno de ellos.
1 Las señales de tránsito y semáforos son extraños adornos urbanos inferiores en estatus de respeto a las estatuas: la idea es perder ese acatamiento que estos carteles y luces se han ganado injustamente, son cosas... artefactos... por ello es que no hay que verlas o prestarles atención, hay que pasarlas de largo según nuestro nivel de apurocidad y emergencia personal. El daltonismo, la falta de anteojos bifocales o la ceguera momentánea o de selección son excusas de uso frecuente para esquivarnos ante un intento de multa.
2 No usar guiño ni balizas: las luces de dirección son adornos o accesorios sin sentido, para que avisar lo que pensamos hacer si ya lo sabemos nosotros, ¿Qué le importa al pobre diablo que está atrás nuestro si vamos a la derecha o la izquierda? ¡Qué adivine!
3 Usar el guiño y las balizas unos 2 segundos antes de la maniobra: en casos de extrema necesidad se debe dar aviso de nuestros movimientos de circulación con antelación de 2 segundos, con anticipación mayor a los 3 segundos ya es mucho preocupación por el otro, es como dejar a los demás inmiscuirse en nuestra vida.
4 ¡Pero dijiste que no había que usarlos!... bueno... ser ciclotímico espontáneo indeciso y Impredecible con el uso de las señales lumínicas accesorias de tu arma de cuatro ruedas: reflejar nuestro estado de humor por medio de las señales luminosas de nuestro auto, cuando y si estamos de buen humor avisar o bien si estamos de malas avisar todo lo contrario de lo que haremos. Es más se pueden pintar o extraer para no utilizarlos si es necesario.
5 La paciencia, la tolerancia y el respeto no existen el camino de la bocina es primero y nuestra salvación: se debe tocar la bocineta repetidas veces segundos antes de llegar el verde si estamos detrás de otro auto y en forma repetitiva si la persona no está tan apresurada como nosotros. Si lo anterior no funciona Inmediatizar vocablos inelegantes referidos a la madre, abuela, tía y otros familiares de quien ose intentar adelantarnos, o meterse en nuestro camino. Las amenazas solo se usan en caso de estar llegando tarde al trabajo.
6 Realizar actividades múltiples y sin cohesión entre ellas: sabido es que restan atención y concentrancia, pero para ser un necio esforzado hacen falta el celular, el cigarrillo, la comida e incluso libros o diarios, o todo junto, siempre mientras conducimos raudos por las avenidas y calles de nuestra jungla de cemento cuales Meteoros en su carrera de las veinticuatro horas.
7 El peatón es débil no tiene derechos...¿Además porque anda caminando?: el transeúnte no posee en relación con el señor conductor muchos derechos más que mirar cuando cruza la calle y la posibilidad de esquivar en las esquinas a quienes manejan. Es más que necesario gritarles agitando la mano enérgicamente “¡Fuera de mi camino enclenque eslabón de la cadena del tránsito! o ¡Corre por tu vida débil peón del tránsito diario! MUAJUAJUAJUA!” No es aconsejable la persecución o atropello de estos patéticos seres extrañamente tienen el derecho a la existencia.
8 Soy taxista/remisero/colectivero/transportista la calle es mía... y solo mía: el solo hecho de ser transportista de cualquier índole y naturaleza nos hace inmunes a las normas transiteriles y podemos arremeter contra otros, y accedemos al paso cuando no lo tenemos en forma obligatoria dándonos el acceso libre. Si, libre. Y si nos ponen una alfombra roja mejor todavía.
9 Manejo un implemento con ruedas, de tamaño gigante, XXL o de “Inmensidad ¡Ooooh!”: en esta denominación entran camionetas, camiones, colectivos de dos o más pisos, tanques, maquinas viales, tractores, camionetas mostro... el chofer de estos vehículos debe exhibir una especie de mueca ... ¡Témeme pequeño! O ¡Bu!. Las combis, minivans y autos familiares no son así porque son como familiares, no de rudeza fierrera absoluta... llevan niños además de dioses del volante.
10 Interpreto las normas como se me antoja o lo que no está señalizado no tiene validez, si la señalización es confusa no se respeta ... todo es váido, lo digo yo que manejo y tengo carnet que me hace inmune a eso y a la kriptonita: mientras no haya un policía u oficial agente del tránsito se hace lo que sea. Toda regla tiene una excepción e incluso en casos de duda todo es excepcionable. Si no hay cartel explicando, es válido manejar sobre la vereda, bulevares y plazoletas.
¡Si no puedes con ellos úneteles! Y si, estoy harto de la gente que conduce como el traste... he de aquí esta forma de exteriorizar mi ira contenida... ¡Ahhhh! ¡Qué alivio! Siento que me deshice de un peso de una heladera mediana.