¡POR FIN! ¡LOS AYUDA MEMORIA!

¡MAMÁAAAAAAAAA! ¡NO ESTUDIÉ!

Faltan pocos días para que finalicen los ciclos lectivos, y es más que sabido que a esta altura del año se hace necesario un empujoncito para terminar de leer esos apuntes, o bien memorizar ese interminable libro lleno de datos, gráficos y palabras desparramadas en más de 200 páginas. Si la suerte no te acompaña, te veras obligado a leer, memorizar y propinarte golpes contra algún muro para recordar datos técnicos y definidos. Hay una solución además del estudio... los muy subestimados: “Machetes” injustamente vituperados, pero que en realidad son una manera académica de ayuda memoria. y sirven para recordarnos esos datos eruditos que seguramente olvidaríamos... porque somos humanos.

Las 10 formas más populares de usar los ayuda memoria como elementos de carácter pedagógico, educativo y porque no también como salvavidas… pero no ilegal... obvio.

(y las excusas, pretextos o evasivas por si te atrapan)

1. Los papiritos con esos datos que uno no recuerda bien o el escrito enrollado, arrugado o doblado prolijamente con todos los complementos que necesitas para responder la pregunta 1, el ejercicio 2 b. y el cuestionario ese del material que leíste a medias: consiste en realizar notaciones en pequeños papeles, con escritura pequeña, o bien con calidad ortográfica que solo puedas reconocer o traducir vos. No utilizar una grafía exageradamente desastrosa porque confunde al poseedor. Excusa en caso de ser descubierto: “¡Es la lista de compras, profe, créame, mire… verbos irregulares, sufijos, verbos cuasireflejos… mi mamá me envío a comprar esto y todavía no lo conseguí¡”
2. La corbata y vestimenta con anotaciones: similar a la anterior herramienta, son las inscripciones que se realizan en la vestimenta que usaremos el día del examen, coloquio, evaluación o interrogatorio educativo. Debe tenerse en cuenta escribir en los lugares de fácil acceso para nuestra visión y que no requieran esfuerzos yoguísticos para poder leerlos. Excusa: “¡Estuve estudiando tanto que sudé datos que se transcribieron en mi ropaje!” o “Fue mi hermanito es fanático de la bioquímica”
3. El libro sobre los pies o bajo el pupitre: la utilización de medios impresos referidos al tema evaluado, en cercanías de nuestra humanidad, tienen un carácter de ofrecer seguridad a su poseedor… y además sirve como herramienta de recordatorio por si te falto algún puntito o un pormenor sin resolver, que pueden hacer a la nota final. Excusa: “¡Oh!¡Mire que casualidad, el libro se cayó abierto justo en el tema que nos está evaluando! ¡Casualidades de la vida! Cof cof”

4. Tinta e inscripciones en lenguaje cifrado estilo agente secreto: es un recurso que conlleva el doble de trabajo… crear un lenguaje, estudiarlo, copiar la traducción e intentar recordar que decía al momento de la evaluación. Excusa: “No es nada… ¡Shhhhh! en realidad es un mensaje de la agencia para la que trabajo, apruébeme y le estará haciendo un favor al gobierno. Probablemente reciba una medalla.”
5. Tinta invisible: la nunca bien ponderada tinta de limón, que con una vela se vuelve visible… es un poco sospechoso cuando el docente te ve pasando la vela por la hoja. Pero ha funcionado en algunos casos. Excusa: “¡Disculpe! Prendí una vela porque no hay mucha luz acá!”
6. Medios de comunicación o grabaciones: utilización de medios y tecnologías aplicadas a la educación o bien uso de chirimbolos para alcanzar los objetivos. Consiste en grabar los datos relevantes en algún medio escuchable como walkman, mp3, tocadiscos e incluso orquestas. Si esto no resulta el celular y las latitas con cordel atadas en los extremos son medios aceptables para comunicarte con alguien que sepa mucho del tema. Excusa: “¡Perdón tengo un llamado! ¿Si? ¿Mamá? ¿Que el resultado de la ecuación es cual? ¿Cómo que no sabes eso?”

7. Escribir el pupitre o escritorio: una técnica algo desesperada, aunque lógica… si, una lógica algo especial y que raya con la estupidez sensible e inocente. Solo es útil para referir datos pequeños, escribir todos los capítulos de un libro es agotador y algo obvio. Excusa: “Mire las inscripciones de los chicos de hoy…”
8. Tatuajes en el cuerpo estilo “Prison Breik”: recurrir a un tatuador profesional y tatuarse en el cuerpo el contenido total de la unidad evaluad o porque no el libro integro. Es preferible usar tintas lavables y removibles, no es muy sensual un tatuaje de tratados de filosofía, de cuadros de análisis de texto, verbos y funciones numéricas. Si tenes más de un examen en la semana primero borra el anterior. Excusa: "¡Soy tan fanático de sus clases que decidí tatuarme los temas que me recuerdan a usted! ¡Soy el Maicol escolfil de Análisis Matemático I I !"

9. Llevarse un amigo que sepa del tema y presentarlo como un compañerito nuevo: artilugio didáctico y formativo ayuda a que uno pueda alcanzar los objetivos impuestos por los educadores acercando un especialista y enseña a nuestro amigo un nuevo mundo de sociabilización. Excusa: "Se sentía sola y como la ingeniería le gusta la traje… igual solo me está hablando a mi."
10. Ponerse de acuerdo con un amigo y establecer claves o señas simples para comunicarse y disipar dudas: es una muy divertida opción, crear un lenguaje de señas para comparar resultantes, verificar resultados y asegurarnos deducciones correctas. Si el lenguaje es muy complicado confunde. Excusa: “Estoy contracturado, por eso agitaba la mano, guiñaba el ojo, subía las cejas repetidamente y decía: ¡Alfa… verde… Madre… Felipe!”

ATENCIÓN: Esta publicación no intenta hacer apología de delito educativo, apelamos a la buena fe de las señoras, señoritas y señores lectores/as para el prudente uso de esta información. Cabe señalar que no nos hacemos responsables por el mal uso del contenido aquí expresado en términos corruptos, malsanos, ilícitos, putrefactos o indebidos. Promoción sin obligación de compra hasta agotar stock.