¡¡¡Ohhh!!! ¡Algo así como la fuente de la divina juventud!

Aunque sin fuente… ni divinidad…
y ahora que lo medito mucha juventud tampoco.

Llega un momento de veces te ha pasado que llegas al espejo y decís: “¡Oh el tiempo ha pasado! ¡Maldita cronología de la fisonomía humana que ha hecho de mi cuerpo un objeto añejo y ya abandonado de ese “sexapil” que años atrás hacía temblar las tablas del club de baile… Oh Oh”. Aunque no sea tan así, muchas veces nos sentimos como alejados del entorno que lleva el sentido de la moda, la música y lo actual, y que está enmarcado por la juventud. La primera señal es decir frases como: “¡A mi no me importa!” o “Viejos los trapos” o “La juventud se lleva por dentro” “No me digas que luzco como señor porque soy un resuelto pebete”. Que dejan entrever que sentís el ataque del tiempo subyugadote a diestra y siniestra. ¡No desesperes! Si tu intención es prevalecer joven, fresco, lozano, tierno e inmaduro. Hay fullerías para tener en cuenta: la forma de hablar, de comportarse, diferentes estilos de ropa, gustos y costumbres. Que son fáciles de aprender en lugares donde hay mucho bagaje o vagaje cultural de grupos de jóvenes. Si, te es muy difícil acceder a estos espacios, existen trucos para transformarse en un individuo a-temporalizado… he aquí…

¡¡06 Formas fáciles, baratas sin dolor
ni intervenciones quirúrgicas… Para restarse años!!
¡Resultados casi garantizados!

1. La Rock Atitiud: una de las formas más simples de convertirse en un ser no medido por la edad y el paso del tiempo es la actitud rockstar que está enmarcada en un incordio de la existencia del entorno y en pugna con el sistema… es un todo me importa un huevo, ya fue, no a las reglas impuestas y esta todo bien. La idea es vestirse cual astro de música sin serlo, andar semi dormido, arrastrando las palabras y actuar como si fuéramos el centro de atención de un movimiento de música muy en onda.
2. Formar una banda de rack en la que vos seas el vocalista y guitarra líder: si la actitud anterior no funciona como esperabas o contrariamente, viendo que ésta es funcional y posibilita tu movilidad de hombre adulto a tipo sin edad admirado por la pubescencia. Das el próximo paso, crear una banda en la que seas líder indiscutido, un icono del mundo de la música, el ruido, los excesos y el ritmo. Compone temas con realidad social y grito juvenil de desenfreno, desaprobación y dolor de lo instaurado. Con títulos como: “Ya fue” “El sistema me rebana los sentidos” “Eh Jovato” “Nanananana Sistema” “Sarasa Oh Oh” "Baile Ok descontrol Ok".

3. Integrarse a una tribu urbana: contrario a todo el reconocimiento que trae el arte de la música y la vertiginosidad del mundo de los escenarios. Existe la aprobación por sensación de paridad, es decir que te reconocen como si fueras parte del grupo. Transformarte en uno más de estas tribus de muchachos que andan por ahí, si no sos bueno con el skate o la bici, ni te gustan los movimientos musicales sectorizados. Existen dos tendencias muy simples de imitar la flooger que consiste en sacarse fotos y subirlas a la red y la Emo que consiste en llorar, sacarse fotos, llorar y subirlas a lo internet, mientras lloras, claro. Aunque es muy simple y tiene amplios resultados los efectos secundarios suelen ser a nivel intelectual, neuronal y psíquico casi irreversibles.
4. Convertirse en un tipo misterioso lleno de secretos: la actitud “me rodea un aura lleno de ocultismo y cosas oscuras” atrae a la juventud, y más si te vestís como ellos, hablas en sus términos y escuchas la música que ellos consumen. La idea es ser llamativamente un individuo resuelto que va por la vida dejando un halo de oscuridad que genere interrogantes y mitos sobre tu persona “¿Quién es ese flaco lleno de misterio que va resuelto por la vida dejando cierta impresión de Oh soy parte de una contracultura?” caminar a unos centímetros del piso funciona, pero es complicadito.

5. Juntarse con gente más joven: dependiendo del grado de admiración y lejanía cronológica que consideres necesitar para dejar contento o engañar a tu ego, se puede emplear la técnica de amistad y comunes intereses con grupos de jóvenes, adolescentes, púberes y prepúberes… más allá, es decir de niños hacia abajo uno es visto como tío, papá o hermano mayor, por lo que no debemos buscar grupos muy lejanos a nuestra edad física. Por más que en el alma sintamos diez u ocho años.
6. Una personalidad excéntrica: por último y similar al efecto del halo de misterio, la excentricidad logra un efecto de imán de mutua atracción - repelencia con las generaciones más jóvenes que nosotros, hay que demostrar una actitud de atractivo desenfado por la vida, la no aceptación de las reglas impuestas y el descontrol en tus costumbres… beber de la nada en una copa de cristal mientras escuchas un grupo de música actual a las 03:00 a.m. a veces resulta muy efectivo.

Si bien estas técnicas no restan años literalmente, permiten ser admirados como objetos de culto y estar rodeado de jóvenes y adolescentes… y por lo tanto al estar vigentes sintiéndonos sujetos a-temporales. De todas maneras no todas las técnicas han sido comprobadas debidamente, desde ya no probamos la 3 por el peligro que conlleva. La 1 y la 2 son efectivas.